Entrevista a Clínicas Dorsia

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"Solos no podríamos haber montado una clínica ni parecida" Hijo de padre panameño y madre salmantina, Leo Cerrud, franquiciado de la franquicia Clínicas Dorsia, se licenció en Medicina en su Panamá natal y vino a España a seguir formándose.

Trabajó muchos años como médico de atención primaria en el Insalud, se pasó a la medicina privada y después de esa etapa, llegó Dorsia a su vida y le descubrió la medicina estética, especialidad de la que se enamoró.

¿Cómo fue el momento de pasar de empleado a franquiciado?

Llevaba un año trabajando en Dorsia, y en una de las visitas de Cristina Sánchez, la directora general, estábamos charlando tranquilamente, y de repente se me quedó mirando y me dijo: “Leo, creo que tú debes tener la tuya propia”.

¿Y qué te pareció la idea?

Una locura. Yo estaba encantado como empleado y no sabía cómo afrontar el papel de franquiciado. Pero antes de que pudiera decir que no, me dijo: “Yo me encargo”. Y así fue. Pero puse tres requisitos: que la clínica estuviera cerca de mi casa; que existiera un gerente que no vendiera y se dedicara sólo al tema económico; y que mi pareja, que es abogado, fuera ese gerente. Y a las tres cosas me dijeron que sí.

¿Habías sido jefe antes?

No, y creo que no soy un jefe al uso. No tengo nada de autoridad, pero cuento con la ayuda de José María que además de ser el gestor, ejerce de poli malo.

Con la crisis muchas firmas ven tambalear su viabilidad, ¿qué hay que tener para mantenerse?

Bajar los precios y aguantar. Hay que saber adaptarse. Nosotros hemos disminuido el margen porque es mejor ganar menos que tener que cerrar.

¿La franquicia es una aliada?

Totalmente. Solos no podríamos haber montado una clínica ni parecida.

¿Qué es lo que más te gusta de la marca?

Que es muy joven y dinámica. Cuando pienso que ya hemos llegado a la meta y que ya no se pueden hacer más cosas, se reinventan. Tres requisitos fundamentales para ser un buen franquiciado de Dorsia: En primer lugar tener muchísimas ganas de trabajar y no tener miedo al trabajo duro; en segundo, tener una estética agradable, porque es lo que vas a vender; y por último tener una personalidad adaptable porque como he dicho, están siempre innovando.

La mujer siempre ha sido la reina de la belleza pero, ¿el hombre se va haciendo un hueco?

Rotundamente sí. Y en esta clínica tenemos el porcentaje más alto de pacientes masculinos de todas las clínicas Dorsia de España.

¿Cuáles son los tratamientos más demandados?

Tanto en hombres como en mujeres, el botox que es lo que le dio entidad a esta especialidad.

¿Tu próxima meta profesional?

Abrir una clínica en Panamá junto a mi familia, pero ahora estoy demasiado ocupado porque desde hace unos meses soy el Responsable de la Unidad de Medicina Estética Corporal y Nutrición.

Para terminar, una confesión: ¿En casa del herrero, cuchillo de palo?

Para nada. Yo llevo de todo: botox en la zona de la frente,un poquito de relleno en la zona malar, tengo corregido el surco nasogeniano… pero no he perdido nada de expresividad.

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