Patata y Olé, una cuestión de materia prima

Noticias franquicias / 5 de diciembre de 2012

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Patata y Olé es el primer establecimiento que basa su línea de negocio en la cocina de la patata horneada. El éxito de este nuevo modelo de negocio, con sede en Toledo, ha sido tal que en su primer año de vida ya dispone de 4 centros.

Patata y Olé cuenta con su sede en Toledo y nace en 2012 con la filosofía de crear pequeños establecimientos en los que se ofrece un amplio abanico de diferentes platos cocinados con la patata horneada como protagonista.

Teresa Martín, Directora general de la cadena explica, “Nuestra filosofía parte de sorprender cada día a nuestros clientes ofreciendo una amplia variedad de platos con carácter. Nuestra materia prima, la patata es diferente a la que se puede encontrar en el cualquier mercado ya que tiene un tamaño y una forma que destaca por encima de las demás. Además todos nuestros platos están combinados para ofrecer una dieta sana y equilibrada acorde al estilo de vida actual”.

El éxito de la franquicia reside en la capacidad de la franquiciada para adaptarse a la situación actual. En apenas 6 meses han recibido más de 500 solicitudes de información para el plan de expansión de 2013.

Entre su carta variada destacan diferentes tipos de menús adaptados para celíacos, para niños pequeños, adaptados a la cocina mediterránea, y una variedad exclusiva para vegetarianos. “La patata es un alimento energético muy rico en proteínas y se puede adaptar a todos los públicos”, explica Martin.

Cada restaurante de Patata y Olé genera un mínimo de 3 puestos de trabajo. La compañía espera seguir su fase de expansión por todo el país y completar un mínimo de 10 restaurantes para el 2013. Su buena acogida así como la posibilidad de generar autoempleo hacen que la compañía crezca a nivel nacional.

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