Hoy en día están al alza las subrogaciones hipotecarias. Esto se debe a la necesidad de su ahorro en los primeros años de la hipoteca como nos avisa de ello la franquicia Don Piso.
Con la llegada de la COVID-19 se ha visto afectado por la crisis económica el mercado hipotecario. Esto se debe a que una bajada en la compraventa de alquileres conlleva un descenso en las operaciones bancarias que estén relacionadas con las hipotecas. En palabras de Rafael Apolo, “los bancos están lanzando nuevas ofertas para no perder el negocio hipotecario, ´canibalizándose´ entre ellos y sacando mejores productos para que el cliente de otra entidad cambie su hipoteca y se vaya con ellos”.
Las subrogaciones hipotecarias son una estrategia de los bancos para seguir trabajando a pesar de esta gran crisis. Antes de que llegara esta pandemia a nuestras vidas, los bancos seguían funcionando de la misma manera. Con la COVID-19, esto no ha cambiado en los últimos años, lo que se ha producido es un cambio en su forma de ser.
las subrogaciones hipotecarias traen nuevos cambios a los bancos
La subrogación hipotecaria supone una reorganización de las condiciones de la hipoteca. Podemos encontrarnos con dos tipos; en primer lugar, la subrogación de un deudor. Aquí, vemos cambios en las personas titulares de la hipoteca. Y, en segundo lugar, la subrogación del acreedor. En este tipo lo que podemos ver es como alguien no le debe dinero a un banco, sino que se lo debe a otra sucursal. De esta manera, lo que cambia es el acreedor.
El ahorro que se produce de estas operaciones al principio es muy importante. Esto es así, porque al comienzo de todo es cuando más intereses se deben y por ello los gastos de la subrogación se pueden ver prolongados en el tiempo.
En una subrogación hipotecaria los gastos son mínimos. La comisión por subrogación y la comisión del banco son fruto de la tasación. Y, después los gastos restantes, como pueden ser la notaría, gestoría o registro estarán a nombre del banco.
¿Cómo seguirán los mercados después de todo esto?
en un plazo muy corto, vamos a seguir viendo esta guerra por conseguir nuevos clientes por parte de las franquicias inmobiliarias. En teoría, alrededor del primer semestre del próximo año se espera que las cosas vayan mejorando. Y, ya en el segundo semestre la situación podría ser muy favorable para los bancos y volverían a estar en una posición buena respecto a la vivida este año.