Nueva tendencia en el sector inmobiliario: inversión en vivienda como valor refugio

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Según FIABCI, esta supone una inclinación en auge en 2021. Los bajos tipos de interés de los productos financieros y la incertidumbre de la COVID-19 ha beneficiado al sector inmobiliario, constituido mayoritariamente por franquicias. La compra de inmuebles se presenta como una inversión segura, rentable y revalorizable. Esta tendencia generada atrae a perfiles tradicionales como hogares e inversores y jóvenes, antes dedicados al alquiler.

La crisis de la COVID-19 y la incertidumbre que ha generado ha impactado en el sector económico y en el mercado de valores. Esto ha derivado en una alteración a la baja en los tipos de interés de los distintos productos financieros. Así lo ha reflejado FIABCI España, capítulo español de la Federación Internacional de Profesiones Inmobiliarias. Esta coyuntura ha beneficiado al sector inmobiliario español, que está compuesto en su mayoría por franquicias. El hecho se ha visto reflejado en que hogares e inversores ven en la vivienda un activo atractivo en el cual invertir con rentabilidad a largo plazo. De esta manera, se consolida la inversión en inmuebles en un valor refugio. De hecho, los inmuebles suponen en España entre el 80% y el 98% de la riqueza de las familias.

Anna Puigdevall es tesorera de FIABCI España y directora general de la Asociación de Agentes Inmobiliarios de Catalunya (AIC). Destaca que “invertir en tiempos de crisis es una idea alejada de la realidad de muchos núcleos familiares. Pero que “si esta inversión se realiza sobre un bien inmueble que se rentabilizará, el esfuerzo económico merece la pena”, añade. La realidad es que cada vez más familias apuestan por la compra de vivienda pensando en sus hijos y en la rentabilidad a largo plazo que ofrecen estos inmuebles.

Así, la vivienda se presenta como una inversión segura, recuperable y revalorizable. Además de un activo conocido en el que invertir en los tiempos que corren. Esta tendencia no parece que vaya a cambiar de cara a futuro, pues la crisis sanitaria ha puesto el foco en la importancia de la vivienda. Según ha señalado Puigdevall, “la vuelta progresiva a la normalidad ha incrementado las operaciones de compraventa. Ya sean estas de hogares que ven en la vivienda una estabilidad o de familias que buscan nuevos espacios habitacionales”.

Los nuevos perfiles de compradores, constituidos por jóvenes y “millenials”

La crisis también ha atraído nuevos perfiles de compradores. En este caso, se trata de jóvenes y “millenials” que hasta ahora habían apostado por el segmento de alquiler. Es el grupo de edad al que peor ha tratado esta crisis y el que más problemas tiene de acceso a la vivienda. “Teniendo en cuenta que los tipos de interés están por los suelos, los jóvenes empiezan a ver cómo podrán rentabilizar su dinero", señala Puigdevall. "Es una alternativa frente al alquiler. Los pagos mensuales no serían a fondo perdido sino a obtener un buen en propiedad”, añade. Y es que España es un país de propietarios, con una tasa de 1,38 viviendas en propiedad por hogar.

En relación a los inversores, las migraciones habitacionales y la necesidad de liquidez de los propietarios suponen una buena oportunidad. Esto hace que este perfil también vea la vivienda como un valor seguro para invertir. La idea se basa en la adquisición de inmuebles de segunda mano para su rehabilitación y futura puesta en alquiler. Puigdevall asegura que “este perfil se define como compradores con liquidez que saben detectar las oportunidades del mercado. Se Ven en la compra de inmuebles una operación con la que revalorizar una vivienda y obtener rentabilidad de ella”, concluye.

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